Claves para que no te suba la presión arterial

Claves para que no te suba la presión arterial


Aprende a vivir saludablemente para evitar la hipertensión

La presión arterial es la fuerza necesaria para que el flujo de sangre sea regular y la sangre circule normalmente por las arterias y retorne por las venas.

Se habla de hipertensión arterial, cuando la presión es superior a 140/90 mmHg. Este fenómeno es un factor  de riesgo cardiovascular. Generalmente no presenta síntomas, o cuando lo hace, el daño causado al corazón y por ende a otros órganos como los riñones es ya de consideración.

¿Por qué se sube la tensión?

En un 90% de los casos, la causa es desconocida, pero existen una serie de factores que predisponen a que la presión arterial aumente, como son la edad, la historia familiar, el sobrepeso, niveles altos de colesterol en sangre, el sedentarismo o la diabetes. Habitualmente la tensión se eleva por una suma de varios.

¿Se puede hacer algo? ¿Cuáles son las claves para evitar que esto suceda?

La solución a la hipertensión, si no es causada, por alguna enfermedad, puede estar en tus manos. Y es mucho más sencillo de lo que imaginas. Pon atención.

  1. Reduce la sal en las comidas. El simple hecho de no poner el salero a tu alcance, evitará que añadas más sal a tus platos. La OMS recomienda no tomar más de 5gm al día.
  2. Deja de fumar. Existe una relación directa entre el tabaco y el aumento de la presión arterial. Empieza reduciendo la cantidad de cigarrillos al día. Busca ayuda si no puedes hacerlo solo.
  3. Evita el Cuando tu peso está por encima de lo normal, tu corazón debe realizar más esfuerzo para bombear y la tensión se dispara.
  4. Practica ejercicio de manera regular. Sobre todo ejercicio aeróbico. Ya te hemos contado en más de una ocasión que la actividad física mejora el trabajo del corazón porque aumenta el bombeo y el flujo de sangre y eso hace que la presión arterial disminuya.
  5. Controla los niveles de colesterol en sangre. Pregunta a tu médico y hazte analíticas cada 6-12 meses. Ya sabes que no debe superar los 200 mg/dl. Una buena alimentación y el ejercicio te ayudará a bajarlo enseguida.
  6. Cuida tu dieta. Además de la sal, reduce los alimentos enlatados, embutidos y precocinados, o encurtidos, que contienen mucho sodio, y evita los alimentos con grasas saturadas, como las carnes rojas, las salsas grasas, la bollería industrial, los lácteos enteros o los quesos curados.

Apuesta por todo tipo de frutas y verduras, leche y derivados desnatados, cereales integrales, legumbres, pasta y arroz integral, carnes blancas como el pavo o el conejo, pescado azul y frutos secos y cocina con aceite de oliva.

Cuídate, muévete y verás cómo tu presión arterial se estabiliza en poco tiempo.